Y si una mujer apodada «La Correa» le hubiera cascado a un hombre?

¿Cuál hubiera sido la reacción?

Este video retrata el «Doble Estándar» en Estados Unidos: Cuando un hombre le pega a una mujer es maltrato, pero cuando una mujer le pega a un hombre es «You go girl!»…

¿Es posible que esa hipocresía moral sea por lo mismo que pasa en Colombia donde se habla de la violencia doméstica perpetrada por los hombres, pero se ignora y no se castiga aquella perpetrada por las mujeres?

Le Pegaron Duro al Bolillo

A pesar de las condenas que el Bolillo recibió en la opinión pública por el presunto hecho de haberle pegado a una mujer lo que lo llevó a su renuncia como entrenador de la Selección de Mayores ,  creo que el debate en los medios de comunicación y las condenas de la opinión pública son precoces y están basados en suposiciones y testimonios ya que no ha concluido hasta ahora una investigación  y mucho menos una sentencia que lo declare siquiera culpable en un proceso.

Ahora sacaron un juego en el que «El Bolillo pega duro»… ¿Qué hubiera pasado si una mujer apodada «La Correa» le hubiera dado a un hombre?

Al parecer es un hecho que el Bolillo haya agredido a una mujer, sin embargo la identidad de la víctima se ha mantenido reservada y no ha habido por parte de ella una denuncia penal que esclarezca los hechos, ni siquiera ha mostrado la cara ante los medios para dar su versión.

No voy a entrar a exponer ni examinar las contradicciones de los testimonios de esas circunstancias confusas que rodean los hechos, pero éstas son más confusas porque ocurrieron en la madrugada a aproximadamente treinta (30) metros de la salida de un bar con música alta en la que los testigos presumiblemente se encontraban bajo los efectos del alcohol.

En el mismo sentido, no se conocen definitivamente las circunstancias de la noche del 6 de agosto y mucho menos las causas, nadie sabe sobre qué discutieron el Bolillo y la presunta víctima y mucho menos, si hubo alguna acción por parte de ella que pudiera ser considerada como agresión ya sea verbal, física o maltrato psicológico que atenuaran pero no excusaran la presunta responsabilidad del Bolillo por su conducta esa noche.

Aunque un testimonio dice que “nadie hizo nada” en otro se dice que el Bolillo casi fue linchado y que ‘Boris Candela’ evitó que la violencia de la gente acabara a golpes con el Bolillo. Esto también debería ser censurable.

Al igual que su renuncia, la misma confesión deducible de su comunicado pudo haber sido “más que por voluntad propia, por la presión de la empresa que patrocina a nuestro equipo y las voces airadas que pedían su salida desde distintos flancos”: coacción que le quitaría su valor como confesión.

Con excepción de la Senadora Liliana Rendón, René Higuita y Gabriel “Barrabás” Gómez, hermano del Bolillo, no he conocido de otros que hayan defendido públicamente, más no excusado, al Bolillo lo que es un pretexto para introducir un tema del que se habla poco en Colombia y del que hablaré en próximos post’s: los Derechos de los Hombres.