3 razones para votar en blanco o abstenerse de votar

Es un poco irónico que un candidato a Representante a la Cámara por Boyacá escriba un artículo titulado de esta manera.

Antes de sacar conclusiones apresuradas, léalas. Si no está de acuerdo, ‘bote’ el voto por quien quiera.

#3. “Todos los políticos son igual de corruptos”

Es verdad. Año tras año votamos por los mismos políticos.

Los mismos partidos interesados en devolver favores a sus ocultos patrocinadores.

Los mismos ‘delfines’ hijos de íconos políticos de épocas pasadas que vivimos recordando en las telenovelas como “próceres” de la patria que merecen heredar los puestos calentados por sus ancestros.

Los mismos candidatos que están interesados en poder ir a “chupar de la teta” del Estado (más bien de los Ciudadanos), dormir apaciblemente en sesión o faltar por irse de viaje con todos los gastos pagos y al final de un “duro servicio a la patria”, poder aumentarse su propio sueldo.

Todos los políticos son igual de corruptos en la misma medida en que TODOS TODOS los Colombianos votamos pensando solo en la lechona que nos prometió el tal candidato ese; en cuán bonita nos pareció la foto en el tarjetón; o en el jugoso puesto que nos espera.

Sí. Todos los políticos son iguales.

#2. “Qué pereza ir a votar”

Los políticos son iguales en la misma medida en que las elecciones son siempre en domingo.

¡Qué pereza ir a hacer fila para inscribir la cédula en una Registraduría Auxiliar!

¡Qué pereza tener que levantarse temprano a hacer fila delante de otros votantes que van a votar otra vez por el mismo camaleón de la vez pasada solo que esta vez tiene diferentes colores!

Si. Más pereza debe darle al campesino que dice: “¡Qué pereza levantarme a las 5 am a recolectar el fruto de mi duro trabajo para ir a alimentar a toda esa gente que le da pereza ir a votar!”

“¡Qué pereza salir a manifestarme por los derechos no solo míos, sino de los muchos que se benefician de mi trabajo!”

Si. ¡Qué pereza ir a votar! ¡Y un DOMINGO! Mejor que los que no tienen pereza vayan y voten por los mismos políticos corruptos de siempre para que decidan por nosotros cosas por las que nunca votamos.

#1. “¡Por eso el país está como está!”

Votar no cambia nada.

“Este sistema democrático solo sirve para que las mayorías en número y en recursos sigan exprimiendo a la minoría”

“Este sistema democrático solo sirve para que las minorías que tienen todo el poder político y económico opriman a las mayorías desposeídas”

Votar es darle consentimiento y legitimidad a los mismos que tienen las armas para que nos sigan robando a mano armada.

Votar es creer que el sistema que controla las opciones va a cambiarlas por nosotros, los Ciudadanos.

Mejor no ‘botar el voto por nadie’. Apagar el chuzo y decirle a la Corona Española que vuelva para acá que no pudimos gobernarnos.

Feliz día de la Mujer // Happy Women’s Day

Via http://manhood101.com/forum/

La Casa en el Space

Como en la canción de Escalona, quienes vivían en el Edificio Space tenían una “casa en el aire” = Nada.

Eso es lo que sucede cuando se ha reemplazado la verdadera riqueza –la tierra— por lo que es una apariencia de riqueza –el estatus que viene de tener un apartamento en Estrato Seis.

¿Qué tiene que ver lo que ha sucedido con el Edificio Space y con lo que está sucediendo en Boyacá alrededor de los campesinos y la tierra? Más de lo que se piensa.

Durante el transcurso del siglo XX ocurrió un Éxodo del Campo a la ciudad. Este fenómeno puede tener muchas causas –por ejemplo: La Violencia, un Estado fallido que no llegaba a los ciudadanos, la falta de vías de comunicación entre la Capital y la Provincia—, pero un solo efecto: el abandono del campo.

Usted pensará que esto es una tautología —salir en éxodo o abandonar el campo tiene como consecuencia abandonar el campo—, sin embargo hay más detrás de esto. Los Colombianos hemos abandonado la libertad del campo por la seguridad de la ciudad a un gran costo: que el campo  ya no puede sostener a la ciudad.

Este “abandono” se refleja  en la cultura. Se piensa que lo urbano es lo civilizado, lo educado, lo rico; mientras que lo rural es tenido por incivilizado, provinciano, pobre, rústico, analfabeta, etc.“Se cosecha lo que se siembra”.

Por estas valoraciones que culturalmente se tienen respecto del campo y de la ciudad es que ocurre lo del Edificio Space, en la ciudad; y lo de los Campesinos, en el campo.

En el primer caso, debido a que la ciudad tiene preferencia por sobre el campo y ha habido un gran movimiento de población hacia los centros urbanos, ha aumentado la demanda por la propiedad urbana y con ello sus precios. Este aumento ha sido muy positivo para la ciudad como centro turístico y para la construcción, sin embargo existe el temor de que estemos ad-portas de una “Burbuja Inmobiliaria”.

En el caso particular del Edificio Space, los damnificados por la falta de planeación de la constructora, aunque hayan comprado apartamentos carísimos, se encuentran desamparados y sin lugar a donde ir porque en realidad ellos son dueños de nada.

A diferencia de cuando se derrumba un Edificio como el Space, cuando una casa se derrumba, sus propietarios todavía pueden vivir en el terreno mientras vuelven a construir sus casas, porque este es suyo y no es compartido con otros copropietarios.

¿Acaso los propietarios de apartamentos pueden vivir mientras en los escombros de sus casas? No, porque ellos son solo dueños de una “casa en el aire” y son copropietarios de unos bienes comunes en los que no se pueden asentar mientras la constructora reconstruye los apartamentos.

En el segundo caso, en contraste a los sobrecostos que experimenta la propiedad urbana, laColombia rural,  al ser abandonada por irse a vivir en una cara “casa en el aire”, se deprecia frente a la Ciudad y es desvalorada culturalmente.

Este abandono trae como consecuencia que la propiedad rural sea adquirida a muy bajos costos por grandes grupos económicos que se hacen con la tierra convirtiéndose en latifundios del siglo XXI beneficiándose de subsidios que deberían estar destinados a los campesinos, un fraude al campo colombiano.

Este abandono trae como consecuencia que grupos armados ilegales se hagan con las tierras que tradicionalmente eran usadas para sembrar alimentos y las destinen al cultivo de drogas con las cuales insertarle más recursos a la guerra.

Este abandono trae como consecuencia que los Campesinos se alcen porque son despreciados por un Estado urbano que solo llega a las grandes ciudades.

Si por desgracias de la vida a una familia campesina se le destruyera su casa, todavía podría disponer del resto de su predio para vivir en él. Si por desgracias de la vida un campesino se quedara sin dinero para ir a Carulla o al Éxito a comprar el mercado, todavía podría alimentar a su familia con su cosecha.

¿Quiénes son los pobres? ¿Los campesinos o los citadinos en sus “casas del aire”? Lástima que se prefiera darle valor a vivir en una “casa en el aire” que a restaurar la propiedad rural como minifundios y a regresarle la dignidad a quienes la cultivan.